El cambio legislativo se publicó en el Boletín Oficial del Estado y abarca a todos los alumnos de hasta 9º curso que lleguen a Portugal, ya sean extranjeros o emigrantes portugueses que regresen al país.

El decreto-ley recuerda que "en determinadas situaciones" el proceso de concesión de equivalencias resultó "difícil de instruir de forma rápida y eficaz", debido principalmente a la falta de "documentos justificativos, a la complejidad del proceso de legalización y traducción, y también a obstáculos económicos o relacionados con la inestabilidad política y social en los países de origen".

Como consecuencia de ello, la integración de los niños y jóvenes en sus respectivos cursos escolares se hizo "lenta" y, en algunos casos, incluso "ineficaz, dificultando la integración adecuada de estos alumnos en el sistema educativo portugués".

En los últimos cinco años, el número de extranjeros en el sistema educativo portugués ha aumentado un 160%, observándose también un "aumento significativo" de alumnos indocumentados, señala el diploma, que ahora ha otorgado a los centros la facultad de conceder la respectiva equivalencia.

El cambio permite la integración de todos los alumnos en la enseñanza primaria y no incluía la certificación de la finalización del 9º año de escolarización.